La tarde parecía tranquila. El estadio en Puerto España empezaba a llenarse, aunque se podía ver todavía bastantes espacios vacíos en los graderíos. Se podía ver la mirada en ambos conjuntos, solo estaban ahí por una razón. Para llevarse la victoria. Nunca paso por la mente de ninguno que lo que sucedió en el partido se iba dar de la forma que se dio.
El balón comenzó a rodar y se vio desde el inicio que iba a ser un encuentro peleado. Por el lado de Guatemala se veía continuidad en los pases pero a la hora de llegar al marco la profundidad cesaba. Trinidad se paraba bien en el fondo y contrarrestaba cualquier intento de ataque por parte de los chapines.
No fue sino hasta el minuto 60 que vino la primera oportunidad clara de gol cuando Dwight Yorke tuvo la chance de anotar en su pies que por su desgracia vio desvanecerse gracias a la fuerza de voluntad de el arquero guatemalteco Trigueño Foster donde se jugo el físico y tuvo que salir lesionado del partido.
En el minuto 83 se abrió el marcador producto de una serie de pases y la magistral genialidad de Keon Daniel que de un disparo desde el borde del área logro batir al aquero suplente Luís Pedro Molina. El público celebraba y sentía el sabor del triunfo en sus manos.
Guatemala no bajo los brazos y fue con todo a buscar el empate. Mario Rodríguez se adelanto para poder acompañar a Carlos Ruiz en la delantera y cada vez mas el gol se sentía mas cerca. En el minuto 92 se produjo un tiro libre que cobro el mediocampista Marco Pablo Pappa que fue recibido en el corazón del área por el defensa con la camisola #5 Carlos Gallardo con el taco de su zapato que logro terminar en gol y así darle la felicidad a miles de guatemaltecos que miraban el partido en sus casas. De esa forma la cuadrangular se nivelaba y la pelea por el segundo puesto seguía en juego ya que Estados Unidos se aseguro en el primer puesto venciendo a Cuba por 1-0.
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